Ya hemos visto que el mundo de las “Excusas Cristianas” es amplio y variado. No les tiembla el pulso en disparar excusas a diestra y siniestra cuando se sienten acosados o amenazados con cosas horribles como la razón y el sentido común que suelen utilizar los Ateos cuando atacan a su Dios o Religión. Pero en su “Equipaje de excusas” la mayoría de los Cristianos también tienen una serie de versículos Bíblicos que suelen tener siempre preparados para arrojárselos a la cara a quien ose atacar su sistema de creencias. Estos versículos son muy repetitivos y aburridos y son frecuentemente leídos entre los comentaristas de este Blog.
Recordemos que los mecanismos de Excusas de los cristianos pueden ir desde intentar utilizar argumentos “sensatos” (como la interpretación o el contexto) o llegar a extremos de atacar o insultar; inclusive a veces hasta responden cosas absolutamente incoherentes sin relación alguna con el tema a debatir. La idea es siempre responder algo y nunca quedarse callado.
Y claro... ¿Qué sería de una “Excusa Cristiana” sin un Versículo Bíblico para apoyarla?
Los Ateos acusamos, criticamos y condenamos cosas como la violencia y atrocidades del Dios bíblico y sus tiernos ayudantes; mandatos aberrantes, anacrónicos y faltos de moral y sentido común; errores, contradicciones, problemas de traducción; abusos de las divisiones cristianas de la actualidad señalando sus defectos y problemas; y un largo etcétera... Pues, los Cristianos siempre tienen preparado algún ingenioso y mágico versículo Bíblico para responder, contrarrestar e inclusive convertir al infame Ateo y sus estúpidas acusaciones.
Sumerjámonos ahora en el bajo mundo de los Versículos Bíblicos usados como Excusas en los debates con Ateos.